Maimonides

Biografía de Maimonides

Maimonides nació en Córdoba,su  familia era acomodada y distinguida , de parte de padre : eran jueces rabínicos, estudiosos y también dirigentes comunitarios. De parte de madre , justo lo  contrario que la familia de parte de madre que era de humilde condición. Su madre, murió cuando él nació , siendo la hija de un carnicero pero su padre se volvió a casar.

Vida

Desde temprana edad empezó con  sus estudios bíblicos y talmúdicos en la tolerante ciudad de Córdoba. Sin embargo en el  1148 la invasión almohade obligó a que su familia tuviera que aparentar su conversión al Islam. También tener cambiar a menudo de residencia por al-Ándalus. Se movió a   la ciudad de Almería, en la cual dio residencia en su casa a su querido maestro Averroes . Hasta trasladarse aproximadamente en el 1160 con sus hijos a la ciudad de Fez donde residió solamente durante cinco años. Por la  intolerancia almohade fueron obligados a exiliarse, primero durante unos meses, en Palestina y finalmente a Egipto. Maimónides residió allí lo que le quedaba de vida junto a su querida familia, en la famosa ciudad de Alejandría ( Egipto ) . En la cual  se ganaba la vida ejerciendo la medicina sirviendo al visir Saladino, y más tarde en la corte del visir al-Fadl. Era el hijo mayor de Saladino. Con este trabajo obtuvo una gran admiración y mucha fama . En 1177 consiguió ser nombrado dirigente de la comunidad judía de Egipto. A pesar  de que había sido expulsado de España y estaba viviendo en Egipto, Maimónides siempre se calificaba a sí mismo como español . Murió en Fustat el 13 de diciembre de 1204, en la denominada Sinagoga Maimónides. Posteriormente, su tumba fue trasladada a Tiberíades, en el actual Israel, donde todavía es visitable.

Fama

Su fama en Europa es debido a  su extensa obra filosófica. Aunque está muy discutida por el judaísmo, siendo la principal razón  por su gran oposición al misticismo de los cabalistas y su poderosa influencia aristotélica. Se le puede llegar a considerar como  la mayor figura post bíblica . En otros ámbitos , más conservadores se le llegó a considerar hereje del judaísmo. Porque era el responsable de haber convencido a los caraístas de apartarse de sus prácticas originales, y acercándolos al judaísmo rabínico.

Fue muy conocido por sus coetáneos como médico, dejando una importante huella en la tradición popular que muestra a Maimónides, sobre todo, como un médico a quien se atribuyen milagros que le elevan al nivel de santo, un sabio juez y un rabino.

PENSAMIENTO

Como hemos indicado antes, el Pensamiento de Maimónides es una conciliación entre tres conceptos. El enfoque hebreo, el aristotelismo y el neoplatonismo. Este filósofo considera demostrable la existencia de Dios como Ser Necesario. Lo representa como primer motor y primera causa del mundo. Maimónides entiende que la idea de una creación libre en el tiempo es bastante razonable. Al corresponder la creación a una manifestación de la esencia divina. Y esta también puede ser ilimitada y no tiene ningún otro fin que no sea crear este nuestro mundo.

Este personaje comparte con el filósofo musulmán Avicena, la cosmovisión de esferas celestes regidas por inteligencias separadas. La última de las cuales es el agente que ilumina a los hombres de corazón bien dispuestos.

Entre todos los pensadores latinos medievales se considera que la perspectiva de Maimónides es agnóstica en relación al conocimiento de las características o atributos a Dios. Lo que implica que este represente una teología negativa.

Su teología

La teología de nuestro filósofo afirma la imposibilidad del conocimiento de lo que Dios es realmente. Por superar su naturaleza y nuestra capacidad humana de comprensión. De cierta manera este planteamiento se acerca a la idea de Kant de resultar imposible el conocer lo que él define como: “la cosa en sí”, es decir. Podemos saber que se trata de algo. Pero no sabemos de qué trata ese algo, lo único que podemos saber es lo que pensamos de ello.

El prestigio de este como médico y como erudito aumentó rápidamente y se extendió en las dispersas comunidades hebreas, que le llamaban. Le siguen llamando: “Rambam” que es un acrónimo de las iniciales de su nombre en hebreo.

La fama de Maimónides se cimentó en tres pilares: la medicina, la filosofía y la religión hebrea.

En este último punto es considerado incluso en el judaísmo actual como una autoridad. Que todavía es consultada y citada. Especialmente por sus comentarios a la “Misná”, una de las partes del “Talmud” que casi puede considerarse una acotación o interpretación de la misma. Esta obra es la “Mishneh Torá”. Y es ante todo una serie de reflexiones sobre el código de leyes religiosas judías.

¿Que enseñó Maimónides?

Maimónides aportó en sus Trece Principios de la Fe un repaso general de las creencias judías. Estaban basadas en las Escrituras. Además, los principios siete y nueve se chocan con las ideas del catolicismo y la fe bíblica ya que le atribuía a Jesús el papel de Mesías. Teniendo en cuenta las enseñanzas de los apóstoles sobre la cristiandad, como la Trinidad. Su hipocresía manifestada en las sangrientas cruzadas. No es sorprendente que Maimónides no incidiera más en la cuestión de Jesús y su mesiazgo.

Maimónides nos muestra en sus textos: “¿Puede haber mayor piedra de tropiezo que [el cristianismo]? Todos los profetas hablaron del Mesías como el redentor de Israel y su salvador […] . [Por el contrario, el cristianismo] mató por la espada a los judíos, dispersó y humilló a los que quedaron. Alteró la Torá y apartó del camino a la mayor parte del mundo para que sirviera a otro dios en vez de al Señor”.

Criticó:

Sin embargo, a pesar del respeto que se le atribuye. Muchos judíos estaban a favor de pasar por alto las opiniones de Maimonides sobre algunas cuestiones que él mismo tocó sin mucha certeza. La  influencia del judaísmo místico creció, y se popularizó la astrología entre los judíos. Maimonides escribió en otro de sus textos. “Todo el que hace algo por cálculo astrológico, disponiendo sus tareas o desplazamientos en las horas recomendadas por los escrutadores del cielo, merece azotes […]. Todas estas prácticas son mentiras y falsedades […]. Quien crea en estas y parecidas cosas […]. No es sino un necio y carente de entendimiento”.

Maimonides criticó también otra costumbre pero esta vez con certeza. “[Los rabinos] fijaron para sí cuotas a individuos y comunidades e hicieron que la gente creyera, en absoluta insensatez. Era obligatorio y apropiado […] Todo esto está mal. No hay ni una sola palabra, ya sea en la Torá o en los dichos de los sabios [del Talmud]. Que apoye esta creencia

Obras

Maimonides en su juventud escribió poesías religiosas y una epístola en árabe.

Sobre sus conocimientos en medicina escribió un buen número de tratados, como el que dedicó al sultán Saladino. El Tratado sobre los venenos y sus antídotos el año 1199, al hijo del sultán, Al-Fadl. Guía de la buena salud (1198) y la Explicación de las alteraciones (1200).

Sus obras mayores de tema rabínico (talmúdico) son dos: un comentario en árabe de la Mishná, El Luminar (1168), también titulado Libro de la elucidación, y la Segunda ley o Repetición de la ley del año 1180. Constituye su obra magna y consiste en una amplia y minuciosa recopilación por materias de todas las leyes y normas religiosas y jurídicas de la vida judía (es decir, del Talmud).

Estas obras tuvieron mucha fama y le otorgaron a Maimonides numerosos discípulos. También es autor de obras filosóficas de gran peso en el pensamiento medieval, escritas durante los últimos años de su vida, como el Tratado sobre la resurrección de los muertos (1191).

La Guía de perplejos (1190), incorrectamente apodada Guía de los descarriados, es la clave de su pensamiento filosófico. Y ejerció una fuerte influencia en círculos tanto judíos como cristianos y sobre todo escolásticos.

¿Que trata en sus obras?

En ella Maimonides establece una conciliación entre la fe y la razón dirigida a quienes vacilan entre las enseñanzas de la religión judía y las doctrinas de la filosofía aristotélica que entonces imperaban. Demostrando que no hay contradicción en los puntos en que fe y razón parecen oponerse.[4]​ Es decir, una conciliación entre el sentido literal de las escrituras y las verdades racionales, acudiendo a la interpretación alegórica en casos de conflicto.

¿Qué opinaban?

Maimonides fue así que surgieron polémicas por parte de «antimaimonistas» —básicamente, por parte de un grupo de musulmanes que pretendían una lectura literal del Corán.  Los mutallajim— que lo tacharon de racionalista. A pesar de ello fue una obra muy comentada y de gran influencia en el mundo musulmán y la escolástica cristiana, por ejemplo en Santo Tomás de Aquino.

Como judío

Como judío en territorio islámico tuvo una vasta formación en ambas culturas. La tradicional judía y la árabe profana (con sus incorporaciones de la griega), a partir de las enseñanzas de su erudito padre Maimum. Por lo que escribió obras tanto en hebreo como en árabe. En una prosa que se caracteriza sobre todo por la sistematización y la claridad expositiva.