Un tema muy interesante que vamos a tratar hoy es el de Aristóteles y la felicidad. Aristóteles defendía que la búsqueda de la felicidad se podía alcanzar a través del equilibrio.
El filósofo basaba su reflexión sobre la felicidad en la virtud, que se entiende como la práctica y búsqueda de la excelencia. Frente a la virtud, colocó al vicio que a su vez era el error por el exceso o el defecto.
Según Aristóteles la felicidad consistía en vivir y obrar bien, llevando una vida llena de virtudes. La virtud la convirtió en un camino por el que se buscaba adecuar los deseos para poder alcanzar la felicidad, siendo la felicidad el justo medio entre el exceso y la carencia. Por lo tanto, eran características propias de las personas y las tendencias que tenían de actuar de cierta manera concreta.
Así pues, se podría decir que la virtud se convertiría en un hábito siempre que se practique cotidianamente. Es decir, que una persona se convierte en moderada siempre que practique la moderación o valiente cuando practica el coraje.
Entonces, algunas virtudes que se deben practicar para poder alcanzar la felicidad son:
- Coraje: buscar el equilibrio entre la cobardía y la imprudencia, siendo consciente del peligro pero superando el miedo.
- Templanza: sería el punto medio entre el exceso de benignidad y insensibilidad, es decir, que una persona que bebe poco es lo mismo que una que bebe demasiado.
- Generosidad: la caridad debe ser el equilibrio entre el egoísmo y la mezquindad con el derroche incoherente.
- Magnificencia: el punto medio entre la mezquindad y lo vulgar, siendo la virtud vivir con la extravagancia adecuada, sin ser demasiado austero o demasiado llamativo.
- Magnanimidad: debe ser la consonancia entre no darse demasiado crédito, siendo excéntrico, y sentirse grandioso. Aristóteles defendía la autoestima pero con moderación.
- Paciencia: tiene relación con el control del temperamento por lo que una persona no se debe enfadar demasiado pero tampoco ser excesivamente benévolo.
- Verdad: corresponde a la virtud de la sinceridad y honestidad, siendo el punto medio entre la mentira y la honradez forzada.
- Astucia: se relaciona con el equilibro entre la ordinariez y la bufonería, buscando el sentido de humor adecuado.
- Simpatía: según Aristóteles, la amistad es un pilar fundamental en la vida y la felicidad. Debe ser el punto medio entre la antipatía y ser demasiado amable con las personas.
- Vergüenza: debe ser la combinación ideal entre la timidez y la desfachatez, para entender cuándo va a cometer un error y cuando debe arriesgarse.
- Justicia: se define como la calidad de tratar adecuadamente a las personas, siendo el equilibrio entre el egoísmo y el desinterés. Además, es de los temas más extensos de los que ha tratado Aristóteles.