La filosofía en la película Matrix

Matrix y el mito de la caverna de Platón

El primer aspecto filosófico que se nos presenta en Matrix es el famoso mito de la caverna del filósofo Platón (La República, Libro VII). Este mito se resume en lo siguiente: un prisionero se encuentra atado al fondo de la caverna y mirando a la pared. Sobre ella ve sombras de estatuas que se encuentran detrás suya y considera a esas sombras objetos reales (imaginación).

Sin embargo, si el atado se libra de sus ataduras y sale de la caverna, ve las estatuas que producen las sombras (la creencia). Vería así los perfiles de las cosas que hay fuera de la caverna y las cuales no es capaz de distinguir por la luz del Sol. Finalmente ve las cosas iluminadas por el Sol y ve al Sol.

Con este mito, Platón nos quiere explicar que hay dos mundos. El mundo sensible ( lo percibible por los sentidos) y el mundo de las ideas (el verdadero y que solo se pueden alcanzar con la razón).

El paralelismo es existente entre este mito y Matrix, aunque en Matrix lo que el “prisionero” ve, no es el sol, sino que se encuentra ante una realidad desoladora.

Descartes, los sueños, lo real y el Genio Maligno

En Matrix existen dos claros mundos. El primero real, donde las robots controlan a los humanos y los siembran para obtener energía, y el de Matrix, un mundo virtual donde las mentes esclavizadas de los humanos creen que viven en la normalidad.

Por tanto, el factor filosófico de Matrix es el problema de lo real. Es un tema que Descartes ya se había preguntado, ¿cómo saber si en un preciso instante no estás soñando?

Hemos de partir de la base de que Descartes veía al hombre como una unión de cuerpo y mente. Solo la mente puede provenir nuestra seguridad. El hombre es una cosa que piensa. Incluso soñando tenemos la duda de estar durmiendo, por ello tenemos una experiencia mental que nos permite afirmar que existimos.

Es con lo que nos encontramos en Matrix. En Matrix los seres humanos no saben que están viviendo si un sueño o la realidad. Se da una falsa realidad creada por las máquinas y que es confundida con la verdadera.

“¿Alguna vez has tenido la sensación de no saber con seguridad si sueñas o estás despierto?” Está pregunta se la hace el protagonista, Neo, a su compañero Choi al principio. Neo vive atormentado con la sensación de si está soñando o lo que vive es real.

Es por ello que se puede establecer un paralelismo de forma muy clara entre la filosofía de Descartes y Matrix. No se distingue la realidad del sueño y existe un Genio Maligno (las máquinas) que es el creador del engaño.