¿Qué es el positivismo jurídico?
El positivismo jurídico es una teoría jurídica que tiene como objetivo que la moral y el derecho se dividan, lo que conlleva que cualquier relación necesaria que tengan entre estos dos conceptos sea rechazada. El positivismo jurídico o iuspositivismo alega que las instituciones jurídicas son un tipo particular de instituciones sociales.
La división entre derecho y moral se da porque el derecho es independiente y no tiene relación con concepciones morales. Las leyes pueden crearse sin influencia moral, afectando la moral solamente a la eficacia o legitimidad de dicha ley, aunque se puede calificar como injusta o justa.
Está idea se desarrolló a finales del siglo XIX y principios del XX. Destacan las figuras de Carl Schmitt (partidario del nacional-socialismo) y Hans Kelsen (partidario de la democracia). Para Kelsen el derecho debía surgir de un procedimiento legal, sin embargo para Schmitt debía derivar de la decisión del soberano.
Este pensamiento se define como normas que, evitando alguna interpretación moral, ya que confiaban en la voluntad política del pueblo representado por unas instituciones que garantizan los derechos de los individuos. El jurista se limita a acatar lo dictado.
Esta corriente también tiene varias versiones, aunque todas tienen en común que no comparten la idea de lo metafísico, argumentando que el objetivo del positivismo jurídico es el derecho positivo, es decir, en la relación que este tiene, desde su principio hasta su final, con ciertos fenómenos sociales.
Se suele confundir el positivismo con el iusnaturalismo, sin embargo hay una gran diferencia entre ellos:
-En el iusnaturalismo, la política se encuentra subordinada a la moral.
-En el positivismo jurídico, la política es independiente a la moral, lo cual existen ciertas instituciones que ejercen en la política.
Así, se puede concluir que el positivismo jurídico es una corriente que no tiene en cuenta la moral y defiende que los derechos están impuestos por un gobierno o legislación.