¿Por qué no debemos permitir que se derogue la Prisión Permanente Revisable?

Primeramente es necesario explicar qué significa esto de la Prisión Permanente Revisable.

Prisión: Pena privativa de libertad junto con el arresto y la responsabilidad personal por los delitos cometidos.

Permanente: Esta será permanente para aquellas personas que no muestren signos de reinserción en la sociedad, como ciudadano no propenso a cometer delitos.

Revisable: Dando la posibilidad de reinserción, la pena se revisará a los 25 años. Una vez cumplido este período, si una serie de psicólogos y juristas consideran que la persona está preparada para salir, podrá hacerlo sin ningún tipo de problema.

El 4 de Octubre de 2016, una mayoría absoluta del Congreso dio su apoyo a una iniciativa del PNV que pide la derogación de la prisión permanente revisable. Entre los partidos que apoyan este cambio se encuentran el PSOE, Unidos Podemos, ERC, PDC y la mayoría de los partidos nacionalistas.

Los principales argumentos de quienes están a favor de eliminar la pena de prisión permanente revisable se pueden resumir en que es algo anticonstitucional, pues va en contra de la norma que dice que las penas deben estar encaminadas a la reeducación y la reinserción  social de los seres humanos. Otro argumento muy escuchado también, es aquel que dice que no se puede imponer una pena como forma de venganza, ya que esto lo único que causaría es más daño del que supuestamente se quiere evitar.

Una vez leídos los argumentos en contra de mantener esta pena, como ciudadana ajena a cualquier partido político y sin cercanía alguna a los diversos casos en los que podría aplicarse la PPR, considero que no es una buena elección derogarla.

Recientemente hemos podido conocer el famoso caso de Diana Quer, una joven de 18 años que fue asesinada y violada por Jose Enrique Abuín, alias ´´El chicle´´. Este escondió su cadáver durante varios meses, y además poseía una denuncia anterior por parte de su sobrina, a quién había violado a los 17 años y a quién nadie creyó. Pero aquí no termina todo, Jose Enrique fue detenido gracias a una chica a la cuál intento violar, después de haber matado a Diana, que consiguió escapar y dar toda la información sobre él. Después de toda esta lista de delitos, cada cual más repugnante, El chicle ha mostrado su tranquilidad pues sabe que aunque le impongan una pena de 15 años, estará fuera dentro de 7 simplemente por una buena conducta dentro de la cárcel, sin ningún otro tipo de control.

Otro caso, ocurrido hace apenas dos semanas, es el del pequeño Gabriel. Gabriel tenía 8 años, y el pasado 27 de Febrero se denunció su desaparición. Finalmente el  10 de Marzo fue detenida su asesina, Ana Julia Quezada. Esta decidió quitarle la vida al pequeño Gabriel simplemente por celos. Ana Julia lo golpeó varias veces en la cabeza y en el pecho, para finalmente ahogarlo. Escondió su cuerpo en un pozo, y para colmo, fingió durante todos estos días estar afectada por lo ocurrido, mostrando todo su apoyo e incluso ´´colaborando´´ en la investigación. Los profesionales alegan que esta actitud mantenida es propia de una persona con problemas psicológicos.

Hace diez año tuvo lugar el asesinato de Mari Luz Cortés, una niña de cuatro años que fue asesinada por Santiago del Valle. Este poseía diversas denuncias por temas de pederastia  y además fue detectada una parafilia del tipo pedofilia con impulsos sexuales intensos con niñas de baja edad. Fue condenado a 22 años de cárcel, pero sin embargo este pederasta y asesino será puesto en libertad el año que viene, a pesar de presentar problemas psicológicos y de haber sido pillado creando una organización para buscar nuevas víctimas.

Desgraciadamente así hay miles de casos más, de asesinos, violadores, maltratadores etc. Según un estudio realizado en el VIII Congreso Nacional de Investigación sobre Violencia y Delincuencia, el 65% de los presos a los que se les reduce la pena por buen comportamiento, vuelven a reincidir cometiendo los mismos delitos.  Además, aparte de reducir la condena de estas personas, cuando sean puestos en libertad, todos los españoles les estaremos pagando un piso para que por supuesto puedan ser reinsertados sin problema ninguno, y cobrarán durante dos años el paro.

Por todo esto, considero que es necesaria la pena de prisión permanente revisable. No podemos dejar que delincuentes de  semejante magnitud queden libres simplemente por realizar una serie de tareas en la cárcel, poniéndonos en peligro de nuevo a toda la población. Para mí lo que realmente necesitan estas personas es ser tratadas por especialistas, ya que realizar este tipo de actos como las violaciones o los asesinatos a sangre fría, realmente se producen por problemas psicológicos graves que llevan a estas personas a cometerlos.

No podemos permitir que El chicle quede libre dentro de 7 años, porque pueden tener por seguro que volverá a intentar violar o matar a más adolescentes; tampoco podemos dejar que la asesina de Gabriel salga de la cárcel en apenas unos años, pues realmente tiene problemas que no se van a solucionar en una cárcel.

Este tipo de personas deben pasar el resto de su vida cumpliendo condena y siendo tratados; y una vez que hayan sido tratados o quede demostrado que realmente están preparados para volver a la sociedad, entonces podrán volver a tener una vida con total libertad.