El mito de Perséfone

Perséfone

Perséfone (en la mitología romana, Prosérpina), según las versiones más usadas, fue la hija de Zeus, dios del Olimpo, del cielos y del trueno, y de Deméter, diosa de la tierra, agricultura, protectora del matrimonio y de las leyes. Aunque, tradicionalmente, se decía que era hija de Zeus y Éstige, la ninfa del río infernal. La diosa es conocida por el mito del rapto por parte de Hades (dios del Inframundo) o también llamado mito de Perséfone.

Perséfone poseía las divinidades de la vida, la muerte y de la resurrección.

Era una diosa griega, con mucha relación con el Inframundo. Los griegos también la asociaban al comienzo de la primavera.

MITO DE PERSÉFONE

El mito de Perséfone comienza con la aparición de Hades. Cuando él apareció, ya enamorado de la joven, Perséfone estaba paseando y recogiendo flores en Nisa, Sicilia. Rápidamente, el dios del Infierno se llevó a la bella dama para la sorpresa de las ninfas que la acompañaban.

El propio padre de Perséfone participó en el rapto de su hija por parte de su tío, ya que Zeus y Hades eran hermanos. Cuando notificaron a Deméter del raptó de su hija, la diosa acudió inmediatamente a Zeus, pidiéndole ayuda. Este, al ver su tristeza, arrepentido de sus acciones, intentó recuperar a Perséfone.

También se cuenta que Deméter, al enterarse lanzó una maldición sobre la tierra, y los dioses le tuvieron que suplicar que la retirara para que los humanos pudieran vivir. Pero Deméter, desesperada por ver a su hija, dijo que no retiraría la maldición hasta que viesse a Perséfone.

Zeus intentó negociar con Hades, pero Perséfone ya no podría quedarse para siempre junto a su madre, tendría que volver al Inframundo. Había comido un grano de granada, no sé sabe si por decisión propia o por culpa de Hades, por lo que no podría regresar, quedándose en el Inframundo para siempre.

Para ahorrarle la tristeza a Deméter y no ir contra Hades, el dios del trueno se inventó una solución: Perséfone volvería mitad del año, es decir, mitad del año lo pasaría en el Inframundo y la otra mitad con su madre en el Olimpo.

Debido a esto, la hija de Zeus se hizo un ícono, puesto que era la responsable del comienzo de la primavera.

La hija de Zeus se convirtió en la resposable de la estaciones, pero más relacionada con la primavera. Cuando ella regresaba del Inframundo, en marzo, la primavera comenzaba y el invierno terminaba. Las flores florecían y recuperaban su intenso color. El invierno era una manera de recordar el dolor y la tristeza por la vuelta de Perséfone al Inframundo.

Perséfone también estaba directamente relacionada con la agricultura y con la plantación de la cosecha. La tierra empezaba a ser fértil después de su regreso, puesto que, durante su estancia en el Olimpo se le había pedido que no comiera, pero ella había tomado unas semillas, lo que hizo que cuando volvía junto a los demás dioses, los griegos podían empezar a plantar.

Perséfone se adaptó muy bien al Inframundo y supo asumir muy bien las responsabilidades como reina de la tierra de los muertos, y terminó por enamorarse de verdad de Hades.

El matrimonio de Perséfone y Hades fue estéril, no tuvieron hijos. No obstante, Perséfone fue seducida por Zeus, su padre, que había adoptado forma de serpiente y tuvo a su hijo Zagreo. También se dice que Hades tuvo una hija, Macaria, pero no sé sabe quién era su madre, podría ser Perséfone.

OTROS MITOS

Perséfone como reina del Inframundo

Se dice que Perséfone como reina del Inframundo, solamente mostró clemencia una vez. Cuando Orfeo le pidió llevarse a su esposa Eurídice, la diosa aceptó por la música tan triste y melancólica que este tocaba. La condición para volver al mundo de los vivos fue que ella caminara por detrás de él y él no podría mirar para atrás hasta que llegaran a la superfície. Al estar a punto de llegar al final del camino, Orfeo se olvidó de la condición y miró para atrás para asegurarse que su esposa lo seguía, haciendo que Eurídice volviera al mundo de los muertos y Orfeo se quedara viudo otra vez.

El mito de Adonis

A Perséfone también se la sitúa en la historia de Adonis, esposo de Afrodita. Aunque Afrodita hubiese tomado a Adonis bajo su protección desde del nacimiento de este, no pudo resistirse a su belleza sobrenatural. Entonce la diosa del amor le entregó a Perséfone a Adonis bajo su protección. De la misma manera, Perséfone quedó hechizada por su belleza y se negó a devolvérselo. Zeus consiguió resolver la disputa entre las dos diosas, haciendo que una cada una pasara 4 meses con Adonis, y que los 4 meses restantes lo pasara él solo.

La ninfa Mente

Cegada por el amor que sentía hacía Hades, cuando Perséfone vió que Hades estaba con la ninfa Mente, se cuenta que se la llevó a rastras del Inframundo y fuera la empezó a pisotear hasta que su cuerpo quedó molido, pero como su cuerpo desprendía un olor fresco, Hades, conmovido, la convirtió en una planta de menta. Otra versión del mito cuenta que ambos ya se veían antes del rapto de Perséfone y cuando esta llegó, la ninfa con un ataque de rabia, la empezó a insultar, diciendo que ella era más bella y que reconquistaría al dios de los muertos. Esto enfureció a Perséfone y también a su madre, Deméter, que empezó a pisotearla, hasta que la ninfa murió, haciendo que renaciera como una planta estéril, que la diosa de la agricultura impidió que floreciera.

Pirítoo y Teseo

Pirítoo y Teseo se prometieron entre sí que se casarían con hijas de Zeus, pero Pirítoo ya estaba enamorado de Perséfone. Teseo escogió a Helena, a quien secuestró con ayuda de su amigo. Después ambos viajaron al Inframundo para secuestrar a Perséfone, y Hades, su marido, fingió ofrecerles hospitalidad y les preparó un banquete. En cuanto los dos amigos se sentaron, dos serpientes se enroscaron en sus tobillos, atrapándolos. Pirítoo se quedó en el Inframundo y Teseo fue rescado por Heracles.