El bacalao al pil pil es uno de los platos tradicionales de la cocina vasca. Se trata de una receta conformada por pescado, aceite de oliva, ajo y guindilla. Una explosión de sabores y frescura.
Si te gusta, o quieres saber más sobre este plato, que habitualmente se prepara en Semana santa junto a otras variantes del bacalao, te recomendamos que nos acompañes.
Mencionaremos el origen del bacalao al pil pil y cómo un malentendido solucionó la hambruna de un pueblo y se convirtió en una referencia gastronómica.
Origen del bacalao al pil pil
A lo largo de la historia, los momentos inesperados dieron paso fenómenos inmortales. Por ejemplo, la manzana que ayudó a Isaac Newton a comprender la gravedad.
Estos pequeños destellos inesperados traspasan a la gastronomía y el bacalao al Pil Pil es la muestra viviente, en este caso el gran plato de Euskadi.
Te contamos cuál es el origen, su historia y a qué hace referencia el nombre.
Origen
No hay evidencias concretas sobre la fecha exacta de la creación de este platillo vasco. Algunos historiadores de la gastronomía española insinúan que es una evolución de otro platillo a base bacalao muy popular, el Bacalao provenzal, aproximadamente en el siglo XX.
Es difícil suponer si fue a comienzos, durante o finales, ya que los libros de historia no recogían estas recetas, considerados para pobres y no parte de una práctica gastronómica de alto gourmet, como era tradicional en aquellos tiempos.
Historia
Lo más interesante del Bacalao al Pil Pil, además de su sabor y exquisitez, es la historia que lo envuelve. Todo comenzó alrededor del año 1835, con un comerciante llamado Simón Gurtubay, quien hizo un pedido a los pescadores por una cantidad de bacalao para sus recetas.
Algunos registros señalan que fue 100 y 120, mientras que otros aseguran que fue 20 y 22.
El caso es que el remitente confundió las cifras del telegrama y anotó un cargamento de 2022 y 100.120 según quién cuenta la historia del bacalao al Pil Pil.
Simón Gurtubay recibió toneladas de bacalao. Mucho más de lo que esperaba originalmente. Para él fue un desafío utilizar la carne del pescado con la reducida cantidad de platos para la época.
Para bien o para mal, explotó la guerra carlista mientras la ciudad de Bilbao estaba siendo asediada. La hambruna se disparó entre los habitantes, y Simón Gurtubay que tenía un enorme cargamento de bacalao, encontró la fórmula para solucionar el problema.
Para la preparación utilizó aceite de oliva, ajos y guindillas, extrajo el aceite del bacalao e hizo una gelatina. Este plato fue despachado a las personas de bajos recursos quienes comían con gran ímpetu la invención del comerciante que, en primera instancia, se vio en problemas y miedo de perder tal cantidad de comida.
Desde entonces el Bacalao al Pil Pil forma parte de la tradición vasca, especialmente en Semana Santa, que es cuando más se consume.
Aunque, si quieres probarlo en otra época del año si decides visitar la Ciudad de Bilbao, encontrarás el plato en cualquier restaurante de la zona especializada en gastronomía vasca.
Nombre
El nombre de la receta también merece un espacio en esta publicación. El desafortunado error ortográfico no es el único elemento lingüístico relacionado directamente con el plato, también una onomatopeya presente durante la preparación.
Y es que cuando se está preparando la sala, y el aceite se liga con la gelatina del pescado, este produce un sonido como ‘Pil Pil’. Desde entonces fue bautizado de esa manera.