La pandemia por el coronavirus Covid 19 parece haber quedado atrás. Hace pocas semanas, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el fin de la emergencia sanitaria global. Aunque la enfermedad de tipo viral y respiratoria siga circulando, el desarrollo de las vacunas y los tratamientos permitieron reducir el daño que causaba sobre las personas y retornar a nuestra vida diaria normal, pre pandémica.

Sin embargo, las medidas dispuestas de aislamiento y distanciamiento social han modificado un sinfín de prácticas anteriores, y varias de las transformaciones que surgieron en el 2020 han llegado para quedarse. Las reuniones virtuales, los trámites a distancia, el reemplazo de las instancias presenciales por otras realizadas a través de las pantallas de nuestras computadoras y celulares demostraron la posibilidad de llevar adelante actividades que antes se realizaban en la calle u otros espacios directamente desde nuestros hogares.

Entre estas actividades se encuentran la asistencia a clases, cursos educativos, trámites bancarios, pago de facturas y otros servicios, y, fundamentalmente, el trabajo. Si bien antes era poco habitual conocer personas que trabajaran directamente desde sus hogares, esta práctica, luego de la pandemia, ha crecido de forma sustancial, dado el uso de nuevas herramientas que permiten que realicemos todo lo que antes hacíamos en la oficina en cualquier lugar del mundo.

Estas transformaciones generaron que en todas las personas que comenzaron a trabajar desde sus hogares hayan empezado a armar un espacio para poder llevar adelante sus tareas diarias de forma cómoda, sin distracciones ni inconvenientes. La necesidad de contar con un buen escritorio para la computadora, un asiento que permita mantener la postura, buena conexión a internet, entre otros elementos, despertó el interés por mobiliario que antes solo se apreciaban en oficinas u otros espacios de trabajo.

Por eso, hoy vamos a ver en detalle qué objetos debe tener sí o sí una oficina en tu hogar.

Opciones de escritorio para tu oficina hogareña

El primer mueble que debes considerar para el armado de un espacio de trabajo dentro de tu casa es el escritorio para computadora. Al ser, probablemente, el objeto que mayor espacio ocupe dentro de la habitación, se recomienda que sea lo primero a ubicar, dado que el lugar que tenga finalmente asignado incidirá en todo el resto de la pieza.

Existen un sinfín de escritorios modernos que funcionarán perfecto dentro de tu nueva oficina hogareña. La oferta es amplia, como lo son también los diseños y formas de estos muebles. Lo más importante a tener en cuenta antes de comprar, además de medir el lugar disponible para el escritorio, es pensar el tipo de uso que le darás y el espacio que precisas para llevar adelante tu trabajo.

No es lo mismo si solo necesitas un lugar para apoyar tu computadora o algo más grande para ubicar papeles, en caso de que trabajes con archivos, como maquetas, si eres arquitecto, por dar un ejemplo. En el primer caso, cualquiera de los escritorios de oficina habituales será más que suficiente. En el segundo caso, seguramente precises de un mueble diferente, acorde a las necesidades y demandas de tu trabajo.

Para ese segundo grupo de profesionales, que necesita de más espacio, un escritorio en L puede ser una buena alternativa, dado que te brindará la posibilidad de tener tu computadora en un lugar, y el resto de tus herramientas de trabajo en el otro.

Solucionado el primer mueble de tu oficina, lo siguiente que debes analizar es la silla de escritorio, un objeto fundamental para poder realizar tu trabajo de forma cómoda.

Una buena silla para tu nueva oficina, la clave para mantener la postura correcta y evitar dolores y contracturas

Al inicio de la pandemia, era habitual que las personas que comenzaron a trabajar en sus hogares lo comenzaron a hacer en cualquier espacio. Sobre la mesa de la cocina, en el sillón o hasta acostados en la cama, las formas de trabajar eran varias, aunque poco idóneas.

Uno de los mayores problemas de estar durante largas jornadas de trabajo sentado o en una posición poco propicia para tu espalda y cintura son los dolores en las articulaciones. Este tipo de contracturas pueden ser sumamente molestas, además de perjudiciales para nuestra salud física.

Por lo tanto, si eres de aquellas personas que trabajan en sus casas, es importante que adquieras una de las tantas buenas sillas de oficina que se ofrecen en las tiendas de muebles. Es importante que este asiento te mantenga la espalda y columna recta, firme, y te permita sostener durante todas las horas de trabajo una postura correcta que no deje secuelas al finalizar el día.

Busca sillas para oficina acordes a tu cuerpo, que te permitan mantenerte alineado con la pantalla de la computadora, que los pies te alcancen el suelo y que no tengas que hacer un esfuerzo físico durante el trabajo. Si bien los especialistas quiroprácticos suelen recomendar de tipo ergonómico, hay opciones más económicas que pueden ser un buen insumo y cumplir esta función clave para tu nueva oficina.

Solucionados estos dos muebles fundamentales, puedes empezar a pensar cómo rellenar el resto del espacio de tu oficina. Puede ser una buena biblioteca, donde puedas guardar tus libros u otros materiales de trabajo, o una baulera, donde puedas mantener ordenado todos tus objetos, disponibles y a mano cuando los necesites. También un velador o una lámpara que te brinde una buena iluminación, en caso de que haya días que trabajes hasta tarde.

Asimismo, más adelante también puedes ver cómo mejorar los elementos de tu equipo de trabajo, como el teclado, el mouse o el monitor de tu computadora. Si bien pueden parecer detalles, son elementos que modifican de forma sustancial la calidad de tu trabajo diario. Y, mientras más cómodo te sientas para realizar tus tareas, mejores resultados obtendrás al llevarlas a cabo.

Con estos tips, ya tienes todo el conocimiento necesario para armar una gran oficina dentro de tu casa y cambiar de manera drástica la forma en la que realizas tu trabajo.