El Marqués de Santillana
Don Iñigo López de Mendoza (primer Marqués de Santillana) fue un militar y poeta del Prerrenacimiento y es considerado uno de los autores más importantes del siglo XV.
Representa el prototipo de caballero letrado de la época y su familia fue una de las más poderosas de la alta nobleza.
En el siglo XV o Prerrenacimiento (periodo entre la Edad Media y el Renacimiento) se mantuvieron los géneros literarios de los siglos anteriores con pequeños cambios. Se eliminaron el mester de clerecía y los cantares de gesta, pero aparece el Romancero viejo, que resurge el género épico con nuevos temas.
Biografía del Marqués de Santillana
El Marqués de Santillana nació en Carrión de los Condes en 1398. Sus padres fueron Don Diego Hurtado de Mendoza y Doña Leonor de la Vega, unos nobles muy influyentes en la época. Al morir su padre, de quien hereda su pasión por la literatura, Don Iñigo quedó al cuidado de su madre y su abuela. Se casó en 1804, siendo aún adolescente, con Catalina de Figueroa, hija de Lorenzo Suárez, maestre de Santiago. Con este enlace, el Marqués se aseguró el crecimiento de su patrimonio. Concibieron diez hijos, de los cuales murieron la mitad.
Tomó parte de la política de la época activamente, casi siempre a favor del reinado de Juan II. Participó en numerosas batallas y se le reconoció su esfuerzo en la batalla de Olmedo (1445) siéndole concedido por el rey los títulos de Marqués de Santillana y Conde de Manzanares.
Poco después se retiró a la corte de Alfonso V de Aragón, donde mantuvo contacto con autores y poetas valencianos y catalanes con la tradición poética de su provincia. Allí reunió una biblioteca muy amplia y comenzó a fomentar las traducciones de autores clásicos y los estudios humanísticos. Finalmente, se retiró a su palacio de Guadalajara en el cual falleció en 1458.
El Marqués de Santillana es un admirador de la literatura clásica grecolatina y de la italiana de Petrarca y Dante, además de una representación perfecta de la fusión de las armas y las letras.
Don Iñigo encarna los valores y virtudes que representan el ideal cortesano renacentista. Estuvo emparentado con figuras posteriores destacadas en la literatura.
Producción literaria del Marqués de Santillana
Fue un reconocido traductor de textos antiguos y un apasionado de la lírica italiana, la cual se ve reflejada en sus obras. También personajes de la mitología e históricos italianos. Su poesía se destaca por la integración de la tradición literaria culta, la propia edición de su obra y la utilización de temas locales con formas poéticas populares.
Se le atribuyen numerosos poemas dialogados, proverbios, prólogos, estudios, sonetos y es especialmente conocido y recordado por sus serranillas, caracterizados por ser poemas cortos de arte menor. También cultivó otros géneros literarios, como poemas alegóricos y doctrinales.
Fue el primer poeta en escribir sonetos en castellano (de origen italiano). Se destacan los 42 sonetos fechos al itálico modo.
Estos sonetos se dividen en tres categorías, según su temática:
- Amorosos: I, III, IV, VI, VII, VIII, IX, XI, XII, XIV, XIX, XX, XXI, XXIII, XXIV, XXV, XXVI, XXVII, XXVIII, XXIX y XXXVII.
- Histórico-políticos: II, V, X, XIII, XV, XVII, XVIII, XXX, XXXI y XXXVII.
- Religioso-morales: XXII, XXXI, XXXIII, XXXIV, XXXV, XXXVI, XXXVII, XXXVIII, XXXIX, XL, XLI y XLII.
El número XXXII fue compuesto en homenaje a la ciudad de Sevilla. Los sonetos de tema amoroso (más de la mitad) están dotados de características petrarquistas.
A través de estas obras el Marqués pretendía inculcar e imponer, de alguna forma, el endecasílabo italiano en su zona. Esto lo logró parcialmente, ya que algunos autores sí que llegaron a utilizarlo.
En todos sus sonetos presenta la huella del gran poeta que era.
Otra de sus obras destacadas es La Comedieta de Ponza. Esta obra fue un poema de inspiración dantesca, y es el perfecto ejemplo de estilo culto del Marqués debido al vocabulario y a las figuras literarias utilizadas. Fue escrita en 1436, tras la derrota del ejército aragonés de Alfonso V, y es de carácter narrativo. Mantiene como tema principal la apreciación de la vida sencilla y apartadas, la fortuna y la derrota. Abundan los cultismos y la sintaxis latina.
Aparecen también personajes como fantasmas o difuntos, mujeres ricas o militares. Es su obra maestra en el estilo alegórico-dantesco.
La obra por la cual es más recordado y conocido son las Serranillas. Fueron inspiradas en una tradición popular autóctona propia e imitando en cierto modo a las pastorelas francesas. Estos poemas de arte menor tratan del encuentro entre una campesina y un caballero.
La serranilla se compone de 6 estrofas de arte menor y encadenadas, en las que se repite una vuelta de tipo abba.
Las serranillas de Don Iñigo se caracterizaron por la idealización de las serranas, a causa de la influencia de la lírica provenzal y sus pastorelas. Las canciones compuestas más adelante en este siglo están inspiradas en las serranillas del Marqués de Santillana. Aquí un ejemplo de una de las más conocidas:
Serranilla III
Después que nací,
no ví tal serrana
como esta mañana.Allá en la vegüela
a Mata’l Espino,
en ese camino
que va a Loçoyuela,
de guissa la vy
que me fizo gana
la fruta tenprana.Garnacha traía
de oro, presada
con broncha dorada,
que bien parecía.A ella volví
diziendo: “Loçana,
¿e soys vos villana?”“Sí soy, cavallero;
si por mí lo avedes,
decit ¿qué queredes?,
fablat verdadero.”Yo le dixe assí:
“Juro por Santana
que no soys villana.”
De su poesía doctrinal destacan dos obras: el Diálogo de Bías contra Fortuna y el Doctrinal de privados. En el primero el filósofo Bías dialoga con la Fortuna y muestra cómo el individuo, con paciencia y generosidad, puede llegar a vencer los problemas de un destino adverso. Finalmente, el segundo fue escrito tras la ejecución de don Álvaro de Luna, su enemigo, la personalidad del muerto es asumida por el marqués, confesando sus culpas y desengañando a los hombres sobre la vanidad de las cosas humanas.
Influencia de Don Iñigo
El Marqués de Santillana, Don Iñigo López de Mendoza, es considerado una de las figuras más cultas y representativas del siglo XV.
Ha tenido un gran influencia en la integración de la poética italiana a la cultura literaria española, reflejada por ejemplo en Garcilaso de la Vega, autor que la aplicó en su obra.