Introducción del libro del buen amor
El libro del buen amor es una obra literaria escrita en el siglo XIV,pertenece al mester de clerecía, es un subgénero literario en el cual la mayoría de los autores eran clérigos pero también pertenecen a este mester, personas de alta alcurnia y con grandes conocimientos, como lo eran los nobles.
Esta obra viene conducida por la biografía de su autor, Don Juan Ruiz comúnmente conocido como Arcipreste de Hita, esta obra consta de 1700 estrofas en la cual se realiza una autobiografía del autor Don Juan Ruiz el cual en la obra es representado como Don Melón de la Huerta. El libro del buen amor muestra un carácter más avanzado del mester de clerecía,conocido como Segundo Periodo. Don Juan Ruiz no sigue con fidelidad ninguna fuente escrita, sino que recibe varias influencias, las estrofas de Don Juan Ruiz se caracterizan por la irregularidad métrica lo que crea estrofas desiguales y con distinta designación
Don Juan Ruiz nació en el año 1283 d.C aunque existen dudas de su lugar de nacimiento, no se sabe si nació en Alcalá la Real, Jaén o en Alcalá de Henares, Madrid, estudió en la universidad y fue encarcelado por orden del arzobispo de Toledo Gil de Albornoz, quizás en el cárcel fue donde escribió este libro. Se ordenó sacerdote y ejerció tal cargo en el municipio de Hita, el cual le da el nombre de Arcipreste de Hita.
Tema del libro del buen amor
Arcipreste de Hita utiliza una gran variedad literaria, haciendo uso de la una narrativa extensa intercalada por pequeños cuentos , ejemplos y digresiones didácticas, lo que le da una gran originalidad literaria a la obra. La narrativa extensa trata los amores del Arcipreste, el cual es el personaje principal de la obra.
La narración de los amores del arcipreste
Empieza con la historia de Don Melón y Doña Endrina, una adaptación al español de una obra escrita en sXII en la lengua romance llamada Pauphilus. El Arcipreste se cambia el nombre a Don Melón, protagonista que con ayuda de la alcahueta Trotaconventos, consigue convencer a Doña endrina, la cual cede para casarse.
El siguiente episodio destacado , trata sobre el encuentro con las serranas. El episodio comienza con la huida del arcipreste a las montañas de Guadarrama, ahí se encuentra con unas serranas. El arcipreste aquí muestra su originalidad literaria, haciendo una parodia del género de la pastorela, una forma musical-lírica de origen pastoril que narra en encuentro de un varón a una pastora, a la cual intenta seducir.
Otro episodio destacado es el episodio de Doña Garoza, en el cual el Arcipreste, representado por Don Melón, es convencido por la alcahueta trotaconventos para seducir a la monja Doña Garoza, quien acaba muriendo. Más tarde, al finalizar la obra la alcahueta trotaconventos muere.
Cuentos y apartados
En todo el transcurso del libro del buen amor se van intercalando cuentos con la narrativa de Don Melón. Estos cuentos pueden ser utilizados de distintas maneras por el autor. Don Juan Ruiz con estos cuentos pretende ejemplificar alguna enseñanza moral, también como conclusión de alguna aventura, y;por último, como un refuerzo dialéctico en los diálogos que mantienen los personajes.
Digresiones didácticas
En la narrativa también incluye un conjunto de digresiones didácticas , que hablaba sobre la cultura de la época, tratando de temas como la música y la validez de la astrología. Asimismo incluye digresiones morales, que trataban temas como los pecados capitales y la confesión, centrándose en la moralidad católica y cristiana. Incluyen:
- Dos episodios alegóricos. Estas dos obras narran el encuentro entre el Arcipreste y doña Venus, en el que ofrece una serie de consejos para el ‘bien amar’, y la batalla entre don Carnal y doña Cuaresma, en la que hace una parodia de las narraciones épicas.
- Diversas composiciones líricas. Escribió temas líricos religiosos y profanas, escribiendo cantigas a la virgen y coplas cazurras.
A todo esto hay que añadirle los textos preliminares en los que se incluye un prólogo en prosa, donde el autor parodia sermones cultos y explica la intencionalidad, supuestamente didáctica, de la obra.
A pesar de toda la variedad estilística, la obra conserva toda la continuidad gracias a la figura del protagonista y el carácter autobiográfico de la misma, ya que en todos los apartados están presentes tanto como el protagonista como el estilo autobiográfico.
Personajes del libro del buen amor
Por el libro del buen amor desfilan toda clase de personajes como: reales (la vieja Trotaconventos), mitológicos (Júpiter), alegóricos (Don Carnal y Doña Cuaresma), y animales (personajes de fábulas). Entre todos ellos destacan las figuras femeninas de la obra
Los amores del arcipreste, son mujeres cualquier clase social y condición; ricas, pobres, viejas, jóvenes. El único tipo de mujeres que Don Juan Ruiz rechaza de plano son las mujeres casadas a las cuales rechaza de lleno, ya que va en contra de las bases eclesiásticas siendo considerado por la Iglesia como adulterio.
La vieja Trotaconventos, es el antecedente literario de la Celestina, es una mujer fría, sin escrúpulos, convenida, y avariciosa. En la obra ejerce de buhonera, o emparejadora, y sabe preparar hechizos, estas mujeres existían realmente en la edad media.
Lenguaje y estilismo del libro del buen amor
Para entender tan preciada obra hay que remontarse a la edad Media donde la cultura popular era muy rica, la cual se refleja en las fiestas de origen pagano, como la fiesta de los locos, y en la literatura paródica goliardesca, un género medieval que parodiaba las famosas obras literarias.
El autor utiliza mayoritariamente las estrofas de tipo Cuaderna Vía, pero también opta por la variedad métrica utilizando cuartetas y zejeles. En el plano literario, utiliza muchos recursos literarios cultos, como enumeraciones, sinónimos, antítesis, y paralelismos, y populares, como la exclamación, la interrogación y la utilización de diminutivos.
La intención del autor en el libro del buen amor
El autor en el prólogo en prosa hace una breve introducción y expresa la intención didáctica de su obra. A lo largo de todo el libro nos habla del amor, a veces del divino y otras del carnal. Algunos críticos creen en la sinceridad de su intención didáctica y opinan que la forma autobiográfica representa esta sinceridad, demostrando sus vivencias, ya que en primera persona da más ejemplaridad. El autor juega con la ironía y la ambigüedad, e intenta confundir al autor con la intención de su libro. La obra mezcla magistralmente lo didáctico y lo humorístico, la devoción más sincera con la sátira más irreverente. en toda la obra Juan Ruiz se dirige a un receptor crítico y alude continuamente a la necesidad de entender de modo correcto su mensaje.