Despedida

Comentario de texto y literarios de «Despedida» de Luis Cernuda.

Muchachos

Que nunca fuisteis compañeros de mi vida,

Adiós.

Muchachos

Que no seréis nunca compañeros de mi vida,

Adiós.

El tiempo de una vida nos separa

Infranqueable:

A un lado la juventud libre y risueña;

A otro la vejez humillante e inhóspita.

De joven no sabía

Ver la hermosura, codiciarla, poseerla;

De viejo la he aprendido

y veo a la hermosura, mas la codicio inútilmente

Mano de viejo mancha

El cuerpo juvenil si intenta acariciarlo.

Con solitaria dignidad el viejo debe

Pasar de largo junto a la tentación tardía.

Frescos y codiciables son los labios besados,

Labios nunca besados más codiciables y frescos aparecen.

¿Qué remedio, amigos? ¿Qué remedio?

Bien lo sé: no lo hay.

Qué dulce hubiera sido

En vuestra compañía vivir un tiempo:

Bañarse juntos en aguas de una playa caliente,

Compartir bebida y alimento en una mesa.

Sonreír, conversar, pasearse

Mirando cerca, en vuestros ojos, esa luz y esa música.

Seguid, seguid así, tan descuidadamente,

Atrayendo al amor, atrayendo al deseo.

No cuidéis de la herida que la hermosura vuestra y vuestra gracia abren

En este transeúnte inmune en apariencia a ellas.

Adiós, adiós, manojos de gracias y donaires.

Que yo pronto he de irme, confiado,

Adonde, anudado el roto hilo, diga y haga

Lo que aquí falta, lo que a tiempo decir y hacer aquí no supe.

Adiós, adiós, compañeros imposibles.

Que ya tan sólo aprendo

A morir, deseando

Veros de nuevo, hermosos igualmente

En alguna otra vida.

Desolación de la quimera (1962)

Comentario

El poema pertenece a su obra “Desolación de la quimera”, de su etapa madura, donde Luis Cernuda trata temas como la guerra, el exilio y la nostalgia por España, reflexionando en lo que se ha convertido su vida y como ha sido a lo largo de los años.

• Estructura externa

El poema cuenta con 9 estrofas, la primera y la quinta con 6 versos, la última con 5 versos y el resto con 4 versos. La métrica es completamente irregular y no existe rima. Esta falta de rigurosidad se asocia a su ansia por mostrar de manera sencilla  y clara sus sentimientos.

• Estructura interna

Tema principal: oposición entre la realidad y el deseo.

1. Introducción: introduce el tema con una despedida a los jóvenes.
2. Desarrollo: deseo que siento por la juventud.
   1. Diferencia entre la vejez y la juventud.
   2. Deseo irremediable que siente.
   3. Dolor que la hermosura de los jóvenes provoca.
   4. Lamento por no haber sido joven cuando ellos lo son.
3. Conclusión: concluye despidiéndose de nueva, esperando encontrarlos de nuevo en otra vida para poder disfrutar del deseo y del amor libremente.

Este poema se centra en su tema principal, común a toda la obra: la oposición entre la realidad y el deseo, que lo lleva a convertirse en alguien frágil. En el mismo poema se tocan diferentes temas como el amor, el tiempo, más concretamente la juventud y la vejez, la nostalgia y la muerte, meditando sobre su pasado y su presente, y haciendo una crítica a la hostilidad de la sociedad, de forma afligida y triste.

En la primera estrofa, el poeta se despide de los jóvenes muchachos con los que nunca ha podido tener contacto. En la segunda, expresa la diferencia entre la madurez y la juventud, una humillante y la otra libre y en la tercera, prosigue afirmando que con la edad y con el tiempo ha aprendido a valorar la hermosura, codiciandola. Sin embargo, tiene que reprimir su deseo puesto que su “mano de viejo mancha” el cuerpo juvenil. En la cuarta, afirma que aquello prohibido y fuera de su alcance es todavía más tentador y continua con una pregunta retórica para saber cómo poder evitar desear a los jóvenes, sin encontrar solución posible. En la quinta estrofa, la voz poética se lamenta por no poder haber vivido con ellos durante su juventud, compartiendo momentos cotidianos como ir a la playa, comer juntos o pasear, sonreír o conversar. Ya en la sexta estrofa, les pide que sigan siendo tan hermosos, desconociendo el dolor y el deseo que provocan en el autor. En la séptima, se vuelve a despedir, mostrando que confía en la eternidad para poder  hacer “Lo que aquí falta, lo que a tiempo decir y hacer aquí no supe”. En la última afirma que espera verlos y poder relacionarse con ellos en otra vida.

El poema se puede dividir en 3 partes: la primera, que es la 1ª estrofa, donde el poeta introduce el tema a través de la despedida que hace a los muchachos. La segunda, más larga, el deseo irreprimible que siente hacia la juventud, expresando la hermosura de los jóvenes y su desconocimiento ante el dolor que esta provoca en la voz poética, lamentándose por no poder haber sido joven con ellos para poder compartir cosas. Por otro lado, la 3ª parte, en las dos últimas estrofas, se vuelve a despedir de ellos, confiando que en una otra vida se puedan volver a ver, allí donde puedan hacer y decir lo que en esta vida no pueden.

En el poema se encuentran muchos recursos como: la primera estrofa es un paralelismo anafórico y hace una apóstrofe a los muchachos, una antítesis entre los dos últimos dos versos de la 2ª estrofa para evidenciar las diferencias entre la juventud y la vejez (“A un lado la juventud libre y risueña;/A otro la vejez humillante e inhóspita.”), un asíndeton (“Mano de viejo mancha/El cuerpo juvenil si intenta acariciarlo.”), una pregunta retórica (“¿Qué remedio, amigos? ¿Qué remedio?/Bien lo sé: no lo hay.”), y un similcadencia (“Sonreír, conversar, pasarse ”).

Durante su última etapa, intensifica la sencillez de sus poemas para poder exponer de forma más clara la idea que pretende transmitir: en el poema reprime sus deseos por los jóvenes porque el pensamiento de una eternidad en la que sea libre de desear y amar lo consuela. Así pues, es evidente que prefiere imponer el contenido a la forma, resaltando lo vital de lo meramente lírico.