Mito de Apolo y Dafne.

En el mito nos encontramos con dos personajes, Apolo y Dafne. Apolo era el Dios de los arqueros, de la música, de la profecía y de la luz. Dafne era una ninfa de los árboles(dríade) y también sacerdotisa de Gea.


Apolo, fue maldecido por Eros después de burlarse al jugar con arcos y flechas. Eros era el Dios del amor y sexo.

Esta maldición consistió en el disparo de dos flechas, una de plomo y otra de oro. La flecha disparada a Apolo fue la de oro, flecha que incitaba el amor. Al contrario que Apolo, Dafne recibió la flecha de plomo, flecha que incitaba el odio.


Tras estos disparos, Apolo se volvió loco por la ninfa Dafne, mientras que esta lo rechazó.

Dafne ya rechazó a varios amantes, prefiriendo más la caza y la exploración de los bosques. Aún así, su padre Ladón o Peneo, le pidió que contrajera matrimonio para así poder tener nietos.


Apolo no dejó de perseguir a Dafne, y al llegar al río Peneo, ésta pidió ayuda a su padre.

Dafne se transformó en laurel, por lo que Apolo no podría tomarla como esposa.

Apolo puso su mano derecha en el tronco, y sintió todavía los latidos del corazón.


Apolo y Dafne en el arte.


En esta imagen contemplamos la escultura realizada por Bernini en el S. XVII. Es una escultura en la que están representadas las figuras de Apolo y Dafne, simulando el mito de la metamorfosis, explicado en el título anterior.


En ella se ve el momento en el que Dafne se transforma en un laurel, tras ser alcanzada al ser perseguida por Apolo.


Pertenece al periodo barroco. La obra se conserva en la galería Borghese de Roma, y se realizó en mármol blanco para los jardines de la villa del cardenal Scipione Borghese.

Podemos apreciar la intención del escultor en mostrar un movimiento característico. Vemos el contraposto de Apolo, realizando su apoyo con la pierna derecha mientras que su brazo derecho y pierna izquierda tienen un sentido opuesto.


Apolo y Dafne en la literatura


Garcilaso de la Vega: En sus poemas aparecen temas mitológicos y amorosos entre muchos otros. La poesía de Garcilaso también contiene odas, epístolas, sonetos, églogas, etc… En los dos últimos tipos de composiciones se hace referencia a el mito de Apolo y Dafne, para ser exacto, en el Soneto XIII y en los vv. 145 – 169 de la Égloga III. En ellos, se narra la persecución entre el dios y la ninfa haciendo más hincapié en el tema amoroso.


Si bien Ovidio narra el mito completo, Garcilaso sólo se centra en la escena final. Aun así, Garcilaso narra más detalles de los hechos anteriores a la transformación de Dafne en laurel. Por ello, la Égloga III es muy parecido al Soneto XIII en muchos aspectos. Tan parecidos que algunos versos son casi iguales. Podemos ver la relación en estos dos fragmentos:


Soneto XIII                                                           Égloga III


“A Dafne ya los brazos le crecían (v.1)            “Mas a la fin los brazos le crecían (v.161)

y en luengos ramos vueltos se mostraban; (v.2)    y en sendos ramos vueltos se mostraban; (v.162)

en verdes hojas vi que se tornaban (v.3)          y los cabellos, que vencer solían (v.163)

los cabellos qu’el oro escurecían: (v.4)           al oro fino, en hojas se tornaban; (v.164)

los blancos pies en tierra se hincaban (v.7)    en torcidas raíces s’estendian (v.165)

y en torcidas raíces se volvían (v.8)”                los blancos pies y en tierra se hincaban; (v166)”

                                                                                     (Revista de literatura, 1984: 63).


Apolo en el arte.


En el arte, son muchas las interpretaciones del mito de Apolo y Dafne. Cada autor le da un toque personal y característico pero sin olvidar que la mayoría representan la metamorfosis de Dafne.


Van Thulden

 

Esta obra estuvo atribuida a Cornelis de Vos hasta que en 2017, se afirmó que pertenecía a Van Thulden.  En esta obra, se presenta a Dafne como una figura bella dándole brillo a la parte posterior del cuerpo, sobre todo la espalda.

El autor puso poco empeño en la metamorfosis. Escasamente vemos que de sus manos salen los brotes y de sus pies, las raíces.


Apolo y Dafne

Antonio del Pollaiuolo

 

Esta obra corresponde a Antonio del Pollaiuolo, este viste a sus personajes con trajes típicos de la época en Florencia. Posiblemente, el fondo del cuadro sea el valle del río Arno, en las afueras de Florencia. Esta pintura, por su escaso tamaño y forma, pudo ser una puerta o una imagen en la  tapadera de un cofre.

 

William Waterhouse

 

En esta obra de William Waterhouse, la imagen de los personajes tiene una temática del  medievo fantástico. A diferencia de la obra de Van Thulden, se deja notar la metamorfosis con ramas rodeando la figura de Dafne.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies