La alimentación que tenían las civilizaciones antiguas era muy distinta a la que tenemos hoy en día, ya que preservar los alimentos no era tan sencillo, además de que la exportación era mucho más lenta, por lo que los romanos solían alimentarse con los alimentos que obtenían directamente de la tierra, como hortalizas, legumbres, cereales, huevos, leche, frutas y verduras. Si te estás preguntando qué alimentos comían los romanos, en este artículo encontrarás bastante información sobre este tema.
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Historia de la alimentación romana
En la época de las civilizaciones antiguas había épocas del año en la que muchos alimentos escaseaban, por lo que tenían que recurrir a ciertos alimentos. En el caso de los romanos era el puls, que era una especie de gachas de harina de trigo. En las épocas ricas en alimento, se comía el puls iuliano, que tenía otras y sesos, además de que se comían acompañadas con vino.
En cuanto a la glotonería y el despilfarro de comida que suele asociarse a los romanos, esto sucio con los romanos de la época imperial, aunque esto no siempre fue así.
Durante muchos siglos el alimento básico de los romanos fue el trigo. Esto se puede ver fácilmente en el hecho de que durante la época de Julio César (44 a.C.) cerca de 240 mil romanos se beneficiaban de la repartición de cereal (annona), el cual se usaba para la producción de harina para hacer pan.
Los romanos obtuvieron el vino de los griegos y su cultura lo adopto con mucha fuerza, por lo que se volvió una bebida que era consumida por todos los romanos, tanto por la clase baja como l alta. En aquella época los romanos solían consumirlo con especies, aguado y caliente.
Las personas que no tenían mucho dinero y comida durante las épocas de carestía solían desayunar sopas que estaban hechas de pan y vino. Las sopas más comunes eran de garbanzos, farro, coles, malva, hojas de olmo, entre otras.
Por otro lado, los romanos que tenían la posibilidad consumían grandes vanidades de leche de oveja y de cabra. La carne que solían consumir era la de cerdo, aunque tiempo después comenzaron a consumir la carne de cordero, oveja, buey, cabras, gamo, carba y gacela, incluso se consumía la carne de perro. Las aceitunas también eran un alimento bastante común en aquella época.
Durante la época de la Republica la alimentación de un romano promedio podía alcanzar las 3 mil calorías, de las cuales más de 2 mil eran obtenidas por el trigo. Las personas ricas eran las que más consumían carne con condimentos que iban desde la salvia, menta, pimienta, miel y coriandro.
En cuanto al número de comidas que tenían al día, lo cierto es que sus costumbres eran igual a las que tenemos hoy en día, ya que las personas que podían comían hasta cuatro veces al día: desayuno (ientacculum), almuerzo (prandium), merienda (merenda) y cena (cena).
Para los romanos la cena era la comida más importante del día, la cual solía hacerse en familia y al final de la jornada laboral. Uno de os momentos que los romanos más disfrutaban era tener una buena conversación en la mesa.
Durante la cena solían consumir alimentos como puerros, huevo duro, lechuga, judías con tocino y gachas. Asimismo, las cenas que eran sofisticadas solían estar separadas en tres partes: el aperitivo (gustus) que sería para abrir el apetito, la primera mesa (que era el plato fuerte) y después la segunda mesa (el postre).
Como puedes ver, en realidad los hábitos alimenticios en realidad son bastante similares a los que se tienen hoy en día en muchos países del mundo, aunque ahora tenemos una gran variedad de alimentos procedentes de todo el mundo en nuestra cocina.